¿Sabes lo que se siente ser una promesa? Lo sé. Incluso una promesa incumplida. El mayor desperdicio del fútbol: yo. Me gusta esa palabra, desperdicio. No solo por cómo suena, sino porque estoy obsesionado con desperdiciar mi vida. Estoy bien así, en un desperdicio frenético. Disfruto de este estigma. No me drogo, como intentan demostrar. No me gusta el delito, pero, por supuesto, podría haberlo hecho. No me gusta ir a discotecas. Siempre voy al mismo lugar de mi barrio, el kiosko de Naná. Si quieres conocerme, pásate. Bebo día por medio, sí. (Y los otros días, también.) ¿Cómo llega una persona como yo al punto de beber casi todos los días? No me gusta dar explicaciones a los demás. Pero aquí va una. Bebo porque no es fácil ser una promesa que sigue endeudada. Y a mi edad, la cosa empeora. Me llaman Emperador. Imagínatelo. Un tipo que dejó la favela para recibir el apodo de Emperador en Europa. ¿Cómo se explica eso, hombre? No lo entendí hasta hoy. Bueno, tal vez hice algunas cosas bie...
Hola soy @wijors hablemos un poco de todo, nací en Guatemala y soy un fan de lo nuestro.